lunes, 23 de febrero de 2015

El Ciclo del Héroe: Pruebas, Aliados y Adversarios


Aprendiendo a conocernos


El Héroe ha cruzado ya el Umbral que da entrada al Mundo Extraordinario, derrotando a su temible centinela que lo protege de los intrusos que aún no están preparados para desafiarse a sí mismos.
En otras palabras, ha abandonado al fin la seguridad de su Zona de Confort, es decir, de su mundo cotidiano de todos los días, para adentrarse en un nuevo tiempo y lugar, donde va a vivir la gran experiencia de comenzar a conocerse a si mismo, en toda su amplitud y profundidad, desde lo más luminoso hasta lo más oscuro.




¿Para qué abandonamos nuestro entorno más seguro y conocido para adentrarnos en la incertidumbre de lo desconocido? ¿Qué esperamos encontrar allí?
Solamente una cosa: ¡A nosotros mismos!

  


Y el resto vendrá por añadidura, porque si quieres llegar a algún lugar que realmente merezca la pena en la vida, primero has de saber con certeza quién eres, de dónde vienes, y solo así sabrás bien a dónde quieres ir.
Ahora te voy a compartir una enseñanza que la Vida me ha dado; de hecho me la dio hace mucho tiempo... Hasta que nos vas más allá del límite de lo que tú crees que puedes resistir, bien empujado por las circunstancias o bien de motu propio, no podrás ver de cerca, sintiéndolo con intensidad, lo mejor y lo peor de ti, y será entonces cuando realmente comiences a saber quién eres.



 
Hasta ese momento lo único que sabías de ti mismo era lo que otros te habían dicho, una historia relatada por otras personas que tú habías hecho propia, pero que no necesariamente era verdad.
Por este motivo el Héroe ha de vivir sus propias pruebas; pruebas que necesariamente son de diseño, es decir, personalizadas y adaptadas a su propia forma de ser, circunstancias, historia personal, y por supuesto teniendo en cuenta las lecciones a aprender.




Una prueba es una experiencia de toma de Consciencia, a través de un obstáculo que puede ser un desafío de Coraje, una pérdida, un esfuerzo de persistencia, un sacrificio, etc.




De esta manera, involucrándonos en todos los sentidos en estas vivencias tan intensas y ciertamente desafiantes, aprendemos a conocernos a nosotros mismos, rompiendo nuestros límites y descubriendo nuestro propio Poder.
Así es, así ha sido desde el principio de los tiempos, y así será por siempre.
Como una espada forjada a fuego y golpes de martillo, como un carbón sometido a enormes presiones para convertirse en diamante.  




Y en este trabajo de conocernos a nosotros mismos nos ayudan dos fuerzas antagónicas y que sin embargo nos llevan a la misma meta: Conocernos a nosotros mismos, hacernos más fuertes, más sabios y más capaces, con una nueva más amplia y profunda visión de nosotros y del mundo, y una siempre Consciencia de nuestro papel en la vida que hemos elegido vivir, con el personaje que representamos y el Espíritu que actúa a través de él. 
 
Son los Aliados y los Adversarios: Los Primeros nos ayudan apoyándonos con su Presencia, su Sabiduría y sus Manifestaciones; pueden ser personas y también circunstancias, acontecimientos -siempre resultado de una o varias Sincronicidades- Poderes y Virtudes propios o de otras personas u organizaciones, y siempre aparecerán en el momento y lugar oportuno... ¡La Vida es pura Magia!





De entre todos ellos, uno de los más importantes es tu Mentor, aquel que ha creído en ti desde el principio, y con el cual podrás contar durante todo el Camino; y junto a él estarán tus otros Aliados, pues como enseña la Sabiduría Atemporal:

"Cuando decides triunfar, el Universo entero conspira para que lo logres.”

Los segundos, es decir, nuestros Adversarios, son de la misma naturaleza que nuestros Aliados, pero ellos se oponen ferozmente y con igual determinación a nuestro avance.
Nos muestran nuestras debilidades y vulnerabilidad, así como nuestros puntos ciegos, muchas veces de la manera más descarnada y cruel que podamos imaginar; pero si sabemos -con Humildad y Amor propio- verlos como Maestros que nos enseñan todo lo que hemos de corregir y aun mejorar, entonces sabremos agradecer con sinceridad y reconocimiento como su paso por nuestra vida nos ha hecho más sabios, más hábiles y más fuertes, ¡y sin ninguna duda mucho más capaces de superar todos nuestros desafíos!




Pero, sin embargo, muchas veces somos incapaces de apreciar este regalo de la Vida, y nos comportamos como víctimas o como guerreros de poca Consciencia, humillados y ofendidos ante sus acciones.
De esta manera nos rebajamos de Héroes o Heroínas de nuestra propia vida a simples víctimas de nuestros destinos, rechazando la enseñanza que la vida nos ofrece como un gran regalo.
Los antiguos Toltecas hablaban de un figura que aparecía en la vida de todo auténtico guerrero que caminara la Senda del Poder y el Conocimiento, y lo llamaban Pinche Tirano.




Se trataba de una persona, hombre o mujer, que actuando desde una posición de poder sobre la vida del guerrero, le aguijoneaba sin piedad, forzándole a superar todas sus debilidades y vulnerabilidades, en un juego de ataques y contraataques en el cual el guerrero estaba llamado a triunfar sobre su poderoso adversario.
Tal era la importancia que le daban, y que en la actualidad le siguen dando, aquellos que seguían esta senda heroica de los Nauatl, que afirman que si no tienes la gran dicha de encontrar a un Pinche Tirano en tu camino, has de salir a buscarlo hasta encontrarlo y poder enfrentarte a él.
A modo de reflexión, y como una imagen vale más que mil palabras, sobre si forma parte de una película como “El último Samurái,” comparto contigo estas escenas del combate entre Nathan Algreen (Tom Cruise), el discípulo de Samurái americano, y el Maestro Ujio, su gran adversario durante toda la historia.




 Observa cómo Nathan aprende de su gran Adversario y Maestro:




¿Cuántos Adversarios hay en tu vida en estos momentos? ¿Les das el reconocimiento que merecen? ¿Qué estás aprendiendo de ellos?

 


Con estas tres preguntas te invito a reflexionar y tomar Conciencia, y en caso necesario, a ver las experiencias de tu vida desde una perspectiva diferente y más empoderante.

Con este damos el Sexto Paso en el Ciclo del Héroe. Si deseas saber más sobre los cinco anteriores, entra en estos links:

¡Seguimos adelante en nuestro Camino!



lunes, 16 de febrero de 2015

El Ciclo del Héroe: El Mundo Extraordinario


Entrando en la Zona de Incertidumbre y.... ¡Aprendizaje!


Cruzamos el Primero de los Tres Umbrales de nuestro Viaje Heroico para penetrar en el Mundo Extraordinario, el mundo de las infinitas posibilidades, donde tendrás la oportunidad de aprender aquello que necesitas saber para poder vivir tu vida desde la Autenticidad y la Plenitud que te brindarán el Ser Tú Mismo.




En Psicología se conoce a este territorio como Zona de Incertidumbre o de Aprendizaje, porque es precisamente aquí, en este entorno desconocido e incierto, donde podemos aprender que aún no sabemos, principalmente sobre nosotros mismos, pero también sobre el mundo en el cual hemos elegido vivir, fascinante y pavoroso a la vez....





Dentro de este mundo podemos diferenciar dos; uno es el Mundo Profano u Ordinario, aquel que hemos abandonado para recorrer nuestro sendero heroico; y el otro es el Mundo Mágico o Extraordinario en el cual estamos a punto de entrar. 
 

 



Los Nauatl, o Naguales, es decir, los Chamanes Guerreros de la Tradición Tolteca Mexica, los llaman Tonal (al Mundo Ordinario) y Nagual (al Mundo Extraordinario). 
 




Has de saber que el Umbral que separa ambos mundos está custodiado por un férreo guardián, que no permite el paso de nadie que no atesore el suficiente Coraje para enfrentarse y vencer a su propio Miedo, pues el Guardián del Umbral simboliza nuestros Miedos, ¡y es un símbolo muy real!
 




En el libro titulado “La Historia Interminable” el héroe Atreyu ha de atravesar este Umbral, simbolizado por dos gigantescas esfinges que custodian el paso, para así poder llegar hasta el Oráculo del Sur y hallar el bálsamo que cure a la Emperatriz Infantil.
Y estas esfinges eran capaces de ver el miedo en el corazón de cualquiera que intentara cruzar el Umbral...
El siguiente vídeo, que reproduce este fragmento de la adaptación al Séptimo Arte de esta obra, nos muestra cómo el Héroe logra cruzar -a pesar de sus miedos- el Umbral al Mundo Mágico:




Si quieres saber más sobre ésta y otras historias basadas en el Arquetipo del Camino del Héroe, te invito a entrar en este link:

En mi libro “Sé tu mejor versión” comparto el fragmento de una fábula sobre el Miedo y la Libertad, en la cual las protagonistas, una cabra salvaje y otra doméstica, se habrán de enfrentar al feroz lobo negro que custodia el Umbral a la Libertad, que para ellas representa la cumbre de las montañas. 
 





Aquí te comparto la historia:

"-Que buena elección he hecho, que magnífica idea ha sido hacerte caso y seguir tu paso Lutecia! ¡Ahora sí soy libre de verdad! No como mis pobres hermanas allí en el valle, siempre sometidas a los caprichos del pastor y a las dentelladas de su perro maldito.
-No quieras digerir la hierba antes de haberla masticado, Arana! Aún hemos de llegar arriba y apenas hemos comenzado el camino, este es simplemente un lugar de paso, lleno de peligros que tú todavía no conoces.
Apenas terminó Lutecia de decir estas palabras, cuando sus prudentes advertencias cobraron realidad…
Y lo hicieron en forma de una oscura y siniestra figura, el lobo negro, que guardaba celosamente aquellos pasos, pues aquel era su territorio ¡Y nadie podía atravesarlo sin antes enfrentarse a él!


El lobo se acercó bajando raudo por la falda de la montaña y dispuesto a cobrar el tributo que exigía a cuantas criaturas se aventuraban en sus dominios… ¡La vida!
Cara a cara ante ellas, el señor lobo enseñó sus colmillos, mostrando a la vez sus ojos de demonio y su negro pelo erizado. Lutecia no perdió ni un segundo en colocarse en posición de combate, mostrando también sus armas, que eran sus poderosos cuernos, capaces de chocar contra una roca y partirla; sí, ella estaba dispuesta a enfrentarse al temible lobo y a franquear el paso ¡Aunque le fuese la vida en ello!
Pero la pobre Arana no estaba dispuesta a tal cosa, aterrorizada como nunca antes lo había estado ante la visión del temible y feroz lobo…
-¡Dios mío, es enorme! ¡Mucho más grande y fiero que el perro de nuestro amo! Esos ojos, esos colmillos afilados, ese aullido que parece venir del mismísimo infierno… Ay, ay, ay. ¡Comida para esta criatura feroz soy yo!
-¡Rápido Arana! ¡Sube a este peñasco y quédate a salvo mientras yo rechazo a esta alimaña! Y mientras esto decía inclinó la testuz para darle a la acometida del lobo la respuesta que se merecía. Mientras el lobo se recuperaba del golpe, Lutecia señaló un camino seguro entre las peñas a Arana, un atajo a las cumbres donde reinaban las cabras montesas y en donde el lobo no osaría aparecer.
-Escúchame Arana, toma el atajo que sube por tu derecha hacia la peña grande y síguelo hasta el final, ¡Hazlo ahora, rápido! Y cuando llegues arriba estarás segura, ¡hazme caso!
-¿Y que pasará a mis espaldas mientras tanto? ¿Y si el lobo te vence y viene después a por mí? Sería como la hierba fresca del amanecer en sus fauces, ay, ay… ¡No! Yo me voy de aquí, que ahora ya he visto el camino a mi valle ¡Y allí no hay lobo que valga!
-¿Qué estás diciendo pequeña? ¿Que vas a volver a la prisión de tu corral, a seguir siendo esclava de por vida del mezquino de tu amo, como tus pobres hermanas, que no viven sino que se contentan con sobrevivir? ¿Y qué hay de la libertad de correr a tu aire, de ser tu propio amo, sin someterte jamás a nadie?
-Muy cara es la libertad me parece a mí, que mucho hay que esforzarse para conseguirla y más aún para mantenerla, y por no tener amo ni celoso guardián que esté pendiente de mí no tengo tampoco quien me guarde y me proteja. Y además, aquí todo es nuevo para mí, y todo tengo que aprenderlo desde el principio y nada tengo de antemano, y allí todo me es ya conocido y seguro, y para hacer mi día apenas me tengo que esforzar…
-Gracias Lutecia, gracias te doy por haberme querido ayudar, pero a la vista de tanto peligro y sacrificio, bien sé ahora lo que de verdad quiero, ¡Volver a la seguridad de mi corral!”


¿Te gustaría leer la fábula completa y conocer el resto de la historia? Pues aquí tienes el link:

En fin, no es fácil derrotar al Guardián del Umbral, sea cual sea su forma, para poder franquear el paso, pues para vencerle a él hemos de vencernos a nosotros mismos.
¡Y por eso esta experiencia de vida -plasmada con éxito por el Séptimo Arte en numerosas ocasiones- es llamada el Camino del Héroe y de la Heroína!



 
¿Estás preparado, oh Héroe o Heroína de tu propia vida, para enfrentarte a tus miedo y cruzar el Umbral al mundo de las infinitas posibilidades?
¡La Mejor Versión de Ti Mismo te está esperando!

Este es el Quinto Paso del Ciclo del Héroe. Si no has podido leer los cuatro anteriores, aquí te comparto los links:

¡Seguimos adelante en nuestro Camino!



domingo, 8 de febrero de 2015

El Ciclo del Héroe: El Encuentro con el Mentor


Nunca estaremos solos en el Camino


¡Así es! Ten por cierto que jamás estarás sólo en tu Viaje Heroico, pues siempre habrá un Guía, una persona que conoce bien el Camino que tú estás comenzando a recorrer pues él -o ella- ya ha realizado su propio Viaje con éxito, y está allí, dispuesto a ayudarte si tú crees en ti mismo y te comprometes con el desafío de recorrer tu propio Camino hasta el final.




Recibe el nombre de “Mentor” en honor a un personaje de la Mitología Griega llamada así, que era el Maestro del joven Héroe Telémaco, el valeroso hijo de Ulises, a su vez Héroe y también protagonista de la Odisea, y su fiel esposa Penélope
 




La palabra Mentor tiene un significado más bello y profundo de lo que parece a simple vista: Está íntimamente relacionada con el término Sensei, que en japonés quiere decir literalmente: “Aquel que está en el Camino antes que tú.”



 
Es decir, no es un gran maestro que todo lo sabe, y al que nada le queda por aprender, sino que por el contrario es alguien como tú, quien en medio de una crisis se vio a si mismo ante un Punto Crucial en su vida, y decidió seguir La Llamada que le instaba a ponerse en marcha, a despertar del mismo sueño hipnótico y paralizante que también a ti te mantenía encerrado en un pozo de mediocridad, impidiéndote brillar y manifestar la Luz que siempre has llevado en tu interior.
Él o ella recorrieron su propio Camino de Héroes, y ahora aceptan el compromiso y la responsabilidad, en otras palabras, la Misión de acompañarte en el Viaje Heroico que tú has decidido emprender, pues quien reúne el Coraje de enfrentarse a sí mismo y a sus dragones para encontrar y sacar a la Luz el diamante que brilla en lo más profundo de su corazón, merece toda la ayuda del Universo.





El Encuentro con el Mentor se produce siempre en el momento perfecto, pues como enseña la Sabiduría Atemporal: “Cuando el discípulo está preparado, el Maestro aparece.”





Esto sucede como el inevitable y feliz resultado de una o varias Sincronicidades, es decir, de personas, acciones y acontecimientos que parece que no tienen nada que ver entre sí, pero que en realidad están totalmente unidos. ¡La Vida es Mágica!




Y solo es necesario que permanezcas atento, porque cuando comienzas tu Viaje del Héroe o la Heroína fuerzas muy poderosas se ponen en marcha contigo, para acompañarte y apoyarte en tu Camino.
Ellos son tus Aliados, y de entre todos el más cercano a ti, a lo largo del Viaje, desempeñará el rol de Mentor, acompañándote a cada paso que des; cuando le des permiso para entrar en tu vida y formar parte de ella, comenzarás a ver cómo tu experiencia heroica se convierte en un milagro palpable y permanente.




Puede ser alguien cercano a ti; por ejemplo, un amigo o amiga, un familiar, tu pareja, o puede ser también uno de tus compañeros de trabajo.
También puede ser una persona que entre en tu vida con el único propósito de ayudarte en la Aventura más desafiante que nunca antes has vivido: ¡Descubrir quién eres en realidad y recuperar tu legítimo Poder!




Puede que vuestro Mentor o Mentora sigan estando presentes en vuestras vidas una vez haya concluido vuestro Viaje, o quizás sea entonces cuando él o ella sigan su propio camino, pero en cualquier caso, esta Aventura que vais a vivir juntos os unirá para siempre, pues creará un lazo irrompible basado en el Amor, que permanecerá en el futuro, más allá del rumbo que tomen vuestras respectivas vidas.
El Encuentro con mi Mentor -en mi caso fue una Mentora- fue mágico, aparente casual, y muy bonito. Ocurrió hace casi seis años, un día de primavera, y ese encuentro cambió mi vida para siempre, dándome la oportunidad, a lo largo de un proceso maravilloso y muy desafiante, de comenzar a vivir de una manera más consciente,responsable y plena.
En sus palabras: 

"Si alguien ha podido superarse a sí mismo, gracias al valor para enfrentar su Sombra y su Dolor, ese es Manuel; él es verdaderamente un Héroe porque ha sido valiente para mirarse, ha roto barreras y limitaciones para convertirse en su Mejor Versión.
El verdadero Camino del Héroe reside en saber sortear los obstáculos y no desfallecer, en tener el valor de Ser Nosotros Mismos. Gracias por permitirme acompañarte.”

Surá Lillo



¡Atrevámonos a Vivir una Vida Plena y Heroica! Y agradezcamos desde el Corazón y con nuestros propios actos, la presencia en nuestra vida de aquellas Almas generosas e igualmente heroicas que nos acompañan en el más loable empeño que jamás podamos acometer, Ser Nosotros Mismos.

Nos vemos en el Camino.

Aquí tienes los links de los artículos ya publicados sobre el Ciclo del Héroe:



domingo, 1 de febrero de 2015

El Ciclo del Héroe: El Rechazo a La Llamada


Tomar la decisión más trascendental de nuestra vida


¿Salir o no salir de nuestra Zona de Seguridad! ¡He ahí la cuestión! Y ante esta disyuntiva nos hemos de ver inexorablemente, porque una parte muy antigua y poderosa de nuestra Personalidad, que se esconde en lo más profundo de nuestra Psique, no quiere afrontar ningún cambio. 


 

Esta parte de nuestra personalidad más arcaica y primitiva, y que sin embargo mantiene una gran autoridad sobre nosotros y nuestras decisiones, se llama Cerebro Reptiliano o también Cerebro Institivo. Es nuestro cerebro de lagartija...

 


Lo tenemos en común con todos los animales, y también con los reptiles -de ahí su nombre- y con los peces, que son los antecesores de los primeros reptiles terrestres, aunque de eso hace millones de años.
Su función es asegurar a toda costa nuestra supervivencia; a él no le interesa si eres feliz, ¡sino si sobrevives un día más en esta Tierra!
Está ahí, acompañándonos, desde el principio de nuestro devenir en el mundo, cuando sobrevivíamos en oscuras cavernas y enfrentábamos terribles peligros en la naturaleza que formaba nuestro salvaje y siempre incierto entorno, en aquellos lejanos y arriesgados tiempos.
Y nosotros obedecemos -prácticamente sin cuestionarnos nada- sus órdenes y advertencias, pues sabemos, o seguimos creyendo, que de ellas depende nuestra supervivencia.
Más vale malo conocido que bueno por conocer.” ¿Alguna vez has escuchado este popular refrán? ¡Es el lema de nuestro arcaico y sobreprotector Cerebro Primitivo o Institivo!
A mí me gusta decir que si mirásemos el mundo únicamente a través de los ojos -o sea, de los filtros mentales- de nuestro Cerebro Reptiliano, veríamos dinosaurios andando por las calles... ¡En pleno siglo XXI!



 
Y en nombre de esta regla de supervivencia -la nº 1 del fiel reptil que vive en cada uno de nosotros- junto con la programación de la sociedad, que nos impele a darle a nuestra propia seguridad una prioridad absoluta, buscamos siempre mantenernos en nuestra Zona de Seguridad o de Comodidad, porque cualquier paso en dirección a vivir una experiencia nueva y diferente, a rozar aunque sea por un momento la incertidumbre, en definitiva, a adentrarnos en esa misma Zona de Incertidumbre equivale a un... ¡Peligro de Muerte!


 


Sin embargo, ¡la Zona de Incertidumbre es también la Zona de Aprendizaje! Nada nuevo sabrás sobre ti mismo y sobre esta maravillosa y desafiante experiencia que es la Vida si permaneces en tu engañosa y limitante Zona de Seguridad.




Y es nuestro propio Héroe o Heroína Interior quien está llamado a despertar y romper los barrotes de esta cárcel de miedo y conformismo en la que permanecemos, infelices y temerosos, mientras la Vida, con mayúsculas, con todas sus maravillosas oportunidades, transcurre delante de nosotros, día tras días, año a año, hasta que un día llegue el momento, cierto e inevitable, en el cual hayamos de decirle adiós. ¡A no ser que decidas escuchar y aceptar tu propia Llamada Heroica y seguir tu Camino hasta el final!




El Séptimo Arte nos ilustra con un ejemplo magistral esta disyuntiva entre permanecer en lo conocido, en lo seguro, obedeciendo nuestras viejas creencias psicológicas, y atreverse a dar el paso y seguir la Llamada de la Aventura.
En la película “La Historia Interminable,” basada en el libro del mismo título escrito por Michael Ende, el protagonista, un niño lleno de complejos pero con un gran espíritu de aventura, llamado Bastian, se encuentra ante esa decisión de seguir o no su propia Llamada del Héroe, un Héroe llamado a encontrarse a sí mismo rescatando al País de Fantasía del destructor avance de La Nada...



 
El vídeo del fragmento de la película está en inglés, pero puedes leer el texto original en el propio libro de Michael Ende.
En este link puedes saber más sobre este y otros maravillosos libros que ilustran con sus bellas y mágicas historias el Camino del Héroe y de la Heroína:

Rechazar La Llamada tiene como consecuencia poner fin a tu recién comenzado Camino Heroico, enterrando la maravillosa oportunidad de conocerte a ti mismo como realmente eres y así poder empezar a vivir una vida desde la propia Autenticidad, y no desde la mentira y la traición a uno mismo.
O como enseñaba Joseph Campbell, gran divulgado del Arquetipo del Héroe: “Desoír La Llamada significa el estancamiento.”
Eso mismo le sucedió a Jonás, llamado a realizar una Misión entre los hombres, pero debido a su miedo y a su sentimiento de inferioridad y no merecimiento, renuncia, traicionando sus Dones y abortando su propia Grandeza y toda posibilidad de vivir su propia vida con Plenitud.
Hoy en día, desde la Psicología se habla del Complejo de Jonás cuando se refiere a este miedo al éxito basado en el no merecimiento y el sentirse menos que los demás.




¿Pastilla roja o pastilla azul? Elige pues, si quieres convertirte en el Héroe o la Heroína de tu propia vida, o prefieres seguir siendo una víctima más de la vida... ¡Es tu decisión y nadie más puede hacerlo por ti!




Si eliges la pastilla roja, como yo mismo hice seis años atrás, con mucho gusto te acompañaré en tu Camino.

Y ahora, para finalizar este artículo, me gustaría compartir contigo una fábula de propia cosecha, que trata precisamente sobre el Miedo y la Libertad, y la elección que hemos de hacer al respecto. ¡Espero que disfrutes y aprendas mucho leyéndola!

Aquí tienes los links: